Tiempo de lectura: 10 minutos
Un swap es una comisión que se carga o abona en la cuenta de trading de un inversor por mantener abierta una posición en Forex durante la noche. La mayoría de los corredores consideran que el mercado Forex abre y cierra a las 5 pm EST, marcando el final de un día hábil y el comienzo de otro. Cualquier posición cerrada después de las 17:00 horas está sujeta a una comisión de swap, ya que se ha mantenido abierta durante la noche.
Esta comisión swap es el resultado de la diferencia de tipos de interés entre las divisas, y su cuantía depende del volumen de divisas negociadas. Las operaciones de divisas, especialmente en el mercado minorista, suelen realizarse con margen. Los operadores minoristas pueden utilizar varios niveles de apalancamiento, lo que permite un mayor tamaño de posición más allá de la cantidad disponible en sus cuentas. Cuando la operación se transfiere al siguiente día hábil (transferencia), incluso una diferencia de tipos de interés baja puede tener un efecto significativo en función del volumen de divisas que se mantenga mediante el apalancamiento. Cuanto mayor sea el volumen de divisas mantenidas a través de un rollover, más significativa será la comisión del swap. El swap se deposita o retira de la cuenta de operaciones tras una refinanciación a otro día hábil.
Es importante reconocer que tanto las elevadas comisiones de los intermediarios como las variaciones del tipo de cambio pueden borrar los créditos positivos de los swaps. Los inversores deben ser conscientes de ello, ya que afectan considerablemente al swap. Otro aspecto intrincado de los swaps en la industria Forex es la prórroga de tres días de los miércoles. Los gastos de swap del inversor se triplican al mantener una posición durante la noche de un miércoles. Mantener una posición durante la noche un miércoles incurre en débitos/créditos 3 veces la cantidad normal: triple swap. Esto tiene en cuenta la liquidación de las operaciones durante el fin de semana.
Los swaps positivos se generan comprando una divisa (la divisa base) con un tipo de interés más alto contra una divisa con un tipo más bajo (la divisa cotizada). En este caso, el inversor genera un beneficio por mantener una posición durante la noche. Por consiguiente, un swap negativo procede de la compra de una divisa con un tipo de interés más bajo contra un tipo más alto, lo que provoca un débito por mantener una posición activa durante la noche.
Un swap de divisas positivo puede dar lugar a ganancias incrementales por mantener posiciones durante la noche (mantenimiento a medio y largo plazo). Los inversores pueden obtener swaps positivos comprando (yendo largo) y vendiendo (yendo corto) diferentes pares de divisas con tipos de interés favorables. La divisa comprada en una operación larga debe tener un tipo de interés más alto que su homóloga. Del mismo modo, la divisa vendida en una operación corta debe tener un tipo de interés superior al de su contraparte para lograr un swap positivo. El volumen del swap será más significativo cuanto mayor sea el importe de la operación. Un mayor número de unidades invertidas en una determinada operación de divisas se traducirá en un rendimiento de swap más considerable a través de la renovación a lo largo de varios días hábiles.
Los operadores buscan las divisas con la diferencia más significativa en los tipos de interés y tratan de mantener posiciones favorables durante el mayor tiempo posible, obteniendo ganancias incrementales.
Un ejemplo de swap largo positivo sería comprar dólares canadienses frente al yen japonés. Actualmente, el tipo de interés del yen japonés es del -0,10%, mientras que el del dólar canadiense es del 4,50%. Este ejemplo sería una operación larga de CAD/JPY, que daría como resultado un crédito para el operador largo de este par de divisas al final del día hábil. Con un tamaño de lote considerable obtenido a través del apalancamiento, un inversor puede obtener rendimientos constantes a través de un rollover de varios días hábiles. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los tipos de interés pueden no reflejar exactamente los tipos que tienen los corredores, ya que éstos pueden utilizar sus propios valores basándose en lo que les proporcionan las contrapartes.
El importe final de cada swap depende de las comisiones de intermediación y del volumen de la inversión.
Las operaciones con swaps de divisas suelen realizarse cuando el mercado es optimista y los principales índices bursátiles avanzan: un escenario de riesgo. Cuando la economía sufre una recesión, los tipos de interés de las divisas tienden a bajar, lo que ofrece menos oportunidades de éxito a esta forma de operar, que a veces se denomina Carry Trading.
Los operadores de swaps buscan divisas con tipos de interés altos, normalmente de países en desarrollo. Éstas son las que más sufren en épocas de inestabilidad económica, mientras que las divisas estables, como el USD, suelen seguir siendo un refugio seguro para las inversiones. Las divisas en desarrollo tienden a caer considerablemente durante las turbulencias económicas mundiales, lo que significa que las pérdidas sufridas son demasiado importantes para compensarlas con swaps positivos. Los operadores de swaps, por tanto, buscan divisas comerciales estables con diferencias sustanciales en los tipos de interés. Crisis económicas como el crack bursátil de 2008 y la oleada de apertura de 2020 perturbaron la estabilidad del comercio, necesaria para que la negociación de swaps tenga éxito.
Accede a más de 10.000 instrumentos financieros Apertura y cierre automático de posiciones Noticias y agenda económica Indicadores técnicos y gráficos Muchas más herramientas incluídas
Al proporcionar su correo electrónico, usted acepta la política de privacidad de FP Markets y está de acuerdo en recibir futuros mensajes de marketing por parte de FP Markets. Puede darse de baja en cualquier momento.
Source - database | Page ID - 24595
